Informe Clasificado: Flash Thompson (Agente Veneno)

Este informe clasificado esta sacado del capitulo T3E19 - Dame Veneno que quiero morir

Saludos agentes! Volvemos una vez más a los camarotes de la Milano, aunque esta vez nuestra atención se detendrá en uno vacío, ocupado temporalmente por el terrícola Flash Thompson, portador del simbionte conocido como Veneno. Este informe contiene spoilers de comics publicados hasta finales de 2018, aproximadamente

Ficha de personaje

Alias: Agente Veneno

Nombre civil: Eugene “Flash” Thompson

Superpoderes: El simbionte proporciona a Flash todo tipo de habilidades físicas: fuerza, resistencia y agilidad mejoradas, capacidad de alterar la forma, regeneración, camuflaje, etc., e incluso algunas obtenidas del propio Spiderman, sentido arácnido, capacidad de trepar por las paredes, y otras.

Primera aparición: Como Flash Thompson, Amazing Fantasy vol1 #15, junio de 1962. Por Stan Lee y Steve Ditko.
Como Agente Veneno, Amazing Spiderman vol1 #654, febrero de 2011. Por Dan Slott y Paulo Siqueira.

Historia del personaje

Hoy tenemos un informe complicado, porque para hablar de Agente Veneno, tendríamos que hablar tanto de la historia de Flash como de la del simbionte Veneno. Dado que sobre éste último ya habrá otra ocasión de hablar en más detalle, vamos a centrarnos en la historia de su portador durante un tiempo, y en especial sus aventuras juntos, su ascenso como uno de los grandes héroes del universo Marvel… y su noble sacrificio y muerte para salvar a sus amigos.

Para llegar a ese punto, Flash tendría un largo camino que recorrer, pues no es precisamente como un héroe como le conoceríamos por primera vez. Hijo de un padre violento y alcohólico, que le maltrató tanto física como psicológicamente, Flash dio salida a sus sentimientos del único modo que había aprendido, convirtiéndose en un matón en la escuela, un abusón que tenía como objetivo principal a uno de sus compañeros, el empollón Peter Parker.

Incluso cuando Peter consiguió sus poderes arácnidos, no llegó a utilizarlos contra Flash, con una única excepción, durante un combate de boxeo en el que le noqueó de un puñetazo. El apodo de Flash, por cierto, le venía de su velocidad como quarterback en el equipo de fútbol americano de la escuela.

La mayor ironía en esta historia, es que Flash, sin saberlo, estaba torturando al alter-ego de su mayor héroe, Spiderman. De hecho, se convertiría en el fundador de un club de fans del arácnido. No contento con eso, Flash se metió en bastantes líos para ayudar a su héroe del modo que mejor se le ocurría, incluso haciéndose pasar por él en alguna ocasión, lo que hizo que acabara secuestrado por algún villano.

Las cosas cambiarían cuando Peter y él volvieron a coincidir en la universidad Empire State, donde inicialmente intentó volver en contra de Peter a sus nuevos amigos, Harry Osborn y Gwen Stacy. Finalmente, gracias a la intervención de Gwen, acabarían solucionando sus diferencias y convirtiéndose en buenos amigos.

Flash abandonó la universidad para ingresar en el ejército, siendo destinado al sudeste asiático. Durante su período de servicio, tuvo ocasión de intentar proteger los miembros de un templo oculto, entre los que se encontraba Sha Shan, que le cuidó y ayudó a recuperarse de graves heridas.

De regreso a la vida civil, se estableció como uno de los amigos más cercanos de Peter, acudiendo al funeral de Gwen y viéndose inmiscuido en los problemas habituales de Spiderman, en especial cuando su antiguo amigo, Harry Osborn, hijo del difunto Norman, el Duende Verde, adoptó la identidad de su padre y secuestró a Flash, Mary Jane y a la tía May. Más tarde Harry logró superar la locura que se había apoderado de él y Flash le acogió como su nuevo compañero de piso.

Tiempo después Flash comenzó una relación con la antigua novia de Peter, la periodista Betty Brant, casada en ese momento con Ned Leeds, con el que pasaba por muchos problemas. De hecho, Ned en aquel momento, tras haber sufrido un lavado de cerebro por el auténtico, creía ser el delincuente conocido como el Duende. Tras descubrir la relación entre su esposa y Flash, decidió inculpar a su vez a este, pero fue salvado una vez más por Spiderman.

Tras la muerte de Ned, Flash intentó continuar su relación con Betty, pero no duraría demasiado. Poco después, Peter solicitaría a Flash que ejerciera de padrino en su boda con Mary Jane. Esto ocasionó que apareciera en el objetivo de Felicia Hardy, la Gata Negra, antigua novia de Peter, que despechada intentó vengarse de él a través de una relación con Flash. Irónicamente al cabo de un tiempo, sería ella la que desarrollaría sentimientos por él, incluso llegando a pedirle matrimonio, cosa que rechazó, dado que sabía que en realidad el origen de su relación se basaba en una mentira.

Pasando por una grave depresión, Flash siguió los pasos de su padre y cayó en la bebida, llegando a sufrir un grave accidente mientras conducía borracho. Este estado de debilidad fue aprovechado por un resucitado Norman Osborn, que se aproximó a él como su benefactor, aunque sólo pretendía utilizarle como peón contra Spiderman. Los actos del Duende Verde acabarían provocando que Flash resultara gravemente herido, cayendo en coma. Aunque despertaría poco después, permaneció en un estado catatónico y Peter le llevó a su edificio, pasando mucho tiempo en su cuidado, hasta que por fin empezó a mostrar signos de mejoría.

Después de alguna que otra aventura, la divulgación de la identidad de Peter y su olvido posterior, Flash regresó al ejército, siendo destinado a la guerra de Irak. Allí salvó a un compañero de un ataque del enemigo, lo que le hizo merecedor de la Medalla al honor, pero por lo que perdió ambas piernas, tras lo que regresó a Nueva York y reinició su relación con Betty Brant. Pero lo más importante estaba por llegar.

Hablemos ahora muy brevemente del simbionte Veneno. Un alienígena originario del planeta que sería conocido como Klyntar, acabó atrapado y acabó en el Mundo de Batalla durante el evento conocido como Secret Wars, donde otro alienígena, el llamado Todopoderoso, transportó a héroes y villanos para que lucharan y poder estudiarlos. Spiderman estuvo entre los héroes transportados y necesitando reparar su traje, acabó en contacto con el simbionte, sin saber de lo que se trataba. De regreso a la Tierra, Peter empezó a notar que tenía impulsos cada vez más violentos y acabó descubriendo la verdad. Logró separarse de su nuevo traje con la ayuda de los Cuatro Fantásticos y éste acabó fusionándose con un fotógrafo rival de Peter, Eddie Brock.

Juntos, darían lugar el villano conocido como Veneno. Al cabo de un tiempo, empezaron a ejercer a su vez como héroes, o antihéroes, bajo el sobrenombre del Protector Letal. Pero los instintos violentos del simbionte no hicieron más que empeorar y Eddie se vio obligado a separarse de él. Pasaría por otros anfitriones, como el mafioso Angelo Fortunato o Mac Gargan, el villano anteriormente conocido como el Escorpión. Con él permaneció bastante tiempo, formando parte de los vengadores oscuros de Norman Osborn, convirtiendo a Gargan en un sádico caníbal, hasta que fueron separados en el acto final final y caída en desgracia de Norman, el asedio de Asgard, pasando a la custodia del gobierno de los Estados Unidos.

Llegamos por fin al origen de Agente Veneno. Con el objetivo de utilizar al simbionte militarmente, el gobierno creó el proyecto Renacimiento 2.0. probando a fusionarlo con diferentes soldados. Tras una serie de fracasos que acabaron bastante mal para los anfitriones, dieron con Flash. Con una limitación temporal a la hora de permanecer unido al simbionte, los responsables del proyecto equiparon a Flash con el mejor armamento disponible y lo enviaron a una serie de misiones encubiertas. Tras cada misión, que no podía extenderse más de unas horas, manteniendo su voluntad anulada mediante drogas, el simbionte era separado de Flash usando ultrasonidos y devuelto a su cautiverio, para prevenir que la fusión se volviera permanente. Además, en caso de que se superase el tiempo límite, el simbionte llevaba insertada una bomba, que podrían hacer detonar de manera remota.

Tras una serie de misiones exitosas, Agente Veneno fue enviado a una misión en un país de Europa del este, para rescatar a un doctor especialista en armas de vibranium antártico. Sería la primera vez que su camino se cruzaría con el que se convertiría en su principal enemigo, psicópata asesino llamado Jack O’Lantern. Éste, a las órdenes del villano conocido como Señor del Crimen, también intentaba hacerse con el control del doctor. Poco después, en una misión a la Tierra Salvaje para destruir el cargamento de vibranium del Señor del Crimen, el vínculo entre el simbionte y Flash fue llevado más allá del límite de horas, por culpa de la intervención de Kraven el Cazador. Después de que el simbionte se separase de Flash por el ataque de unos murciélagos gigantes, éste vio sorprendido cómo regresaba a él en vez de huir, a pesar de haber recuperado su voluntad. Aquí se empezó a forjar el verdadero vínculo entre Flash y el simbionte, que posteriormente ocultaría a sus superiores.

Aunque Flash finalmente consiguió hacerse con el cargamento de vibranium, el Señor del Crimen estaba vigilando durante el período en que Flash y el simbionte estuvieron, lo que le permitió averiguar su identidad secreta y chantajearle. Jack O’Lantern había secuestrado a Betty, a la que había encerrado con una bomba y sólo le daría la dirección para que llegara a tiempo si le entregaba el cargamento. Obligado a seguirle la contraria y ocultando todo a sus superiores, Flash llevó el helicóptero a Nueva York, donde le habían indicado. Con la dirección donde tenían a Betty y cada vez con menos control sobre el simbionte, que había revertido a su brutal forma tradicional, corrió al rescate de su novia, pero se cruzó con Spiderman, que le confundió con el antiguo Veneno y el enfrentamiento fue inevitable. Sospechando de la conducta de Veneno, Peter se dirigió a la dirección que había obtenido de él y rescató a Betty justo antes de que estallara la bomba, creyéndole responsable.

Poco después de esto, Flash descubrió que su padre tenía cirrosis y estaba a punto de morir. Mientras estaba en el hospital, una grave crisis se desató en Manhattan. La llamada Reina Araña había esparcido un virus que convertía a los humanos en híbridos arácnidos. Aunque la isla fue puesta en cuarentena, uno de los secuaces de la reina, el Rey Araña, imparable, amenazaba con romper el cerco, por lo que enviaron al Agente Veneno a ocuparse de él. Logró reducirle y llevarle a la base del proyecto renacimiento, pero en realidad se trataba de una trampa para esparcir el virus más allá de los límites de la cuarentena. Cuando consiguieron evitarlo y revertir al Rey Araña a su forma original descubrieron que se trataba de Steve Rogers, el Capitán América.

Tras conseguir llegar al hospital a tiempo para ver morir a su padre, Flash utilizó los poderes metamórficos del simbionte para hacerse pasar por el Rey Araña e infiltrarse en las fuerzas de la Reina Araña. Después de un combate en el que la Reina mutó a la forma de una araña gigantesca, fue necesaria la colaboración de varios héroes arácnidos para lograr acabar con ella. Las cosas se iban a poner muy mal para Flash. No sólo el Capi había descubierto la existencia del proyecto Renacimiento 2.0 y exigió su cierre y custodia del simbionte, sino que el Señor del Crimen decidió seguir con su chantaje y envió al asesino Jack O’Lantern para presionarle en el funeral de su padre.

En esta situación, Flash se vio obligado a huir del Capitán América y acompañar a Jack hasta las Vegas. El Capitán América decidió enviar a otro soldado a perseguirle, el General Trueno Ross, antigua némesis de Hulk, convertido ahora en el Hulk rojo. Junto con X-23, la clon de Lobezno y Alejandra Jones, la actual Motorista Fantasma, formaron un equipo improvisado para enfrentarse a Corazón Negro, el hijo de Mefisto, que deseaba abrir un portal para traer el infierno a la Tierra y convertirse en su gobernante supremo. Llegó incluso a asesinar a los cuatro, que acabaron en el infierno, en las garras de Mefisto. Pero el eterno manipulador no deseaba que su hijo venciera, así que aprovechó para hacer un pacto con los héroes y devolverles a la Tierra a cambio de un precio. De este modo lograron trastocar los planes de Corazón Negro, pero recibieron una marca infernal, que tendría consecuencias especialmente para Flash.

Cuando los Vengadores Secretos llegaron para hacerse cargo del simbionte, Trueno Ross abogó a su favor y el Capi decidió otorgarle un puesto en el equipo, muy a pesar de la opinión de su siguiente líder, Clint Barton, Ojo de Halcón. Sin embargo, a lo largo de una serie de aventuras, logró ganarse la confianza de Clint e incluso empezó una relación con una de sus compañeras, la Valkiria Brunilda.

Pronto llegaría el acto final con el Señor del Crimen. Éste estaba reclutando a otros villanos para formar el grupo al que llamaría los Seis Salvajes. Junto a Jack, también estaban Megatak, la Mosca Humana y Víbora Mortal. El sexto miembro se trataría de Eddie Brock, al que obligaron a fusionarse con el simbionte Toxina, que era lo que habían ido a recuperar Jack y Flash a las Vegas, sin que éste último lo supiera. El conflicto con ellos fue brutal, dado que fueron a por las personas más cercanas a Flash, su madre, su hermana y Betty. Finalmente el Señor del Crimen se reveló como el hermano de Betty, un antiguo villano de poca monta que se suponía que había muerto. Para evitar el villano asesinara a Flash, ésta le disparó y acabó con su vida.

Abandonando Nueva York con la intención de empezar de cero, se desplazó a Filadelfia, donde residió durante una temporada. Tuvo varios enfrentamientos, pero el más destacado acabó con él poseído por un demonio. Sin embargo, la marca infernal le daba control sobre el demonio, que al mismo tiempo se veía atrapado en el cuerpo de Flash. Aunque en realidad no era así, sino que era el simbionte el que poseía la marca y el demonio atrapado. Esto lo descubrieron cuando Jack O’Lantern atacó a Flash y puso en peligro a una vecina y una de sus estudiantes, Andi Benton. Para salvar su vida, el simbionte expulso un antiguo clon que había absorbido, que se fusionó con ella. Además de darle los poderes habituales, más tarde averiguaron que tanto la marca como el demonio habían sido transferidos a Andi junto con aquel pedazo del simbionte. Flash prometió que ayudaría a Andi a deshacerse de la marca costara lo que costara.

Más adelante, el general Trueno Ross le reclutó para su equipo de Thunderbolts, pero no tardaría mucho en abandonarlos, dado que los métodos violentos del grupo estaban provocando que perdiera el control sobre el simbionte. Poco tiempo después, tras ganarse el título del vengador honorario por su ayuda al grupo, fueron éstos los que le solicitaron que se incorporase a los Guardianes de la Galaxia, para ejercer de conexión entre ambos equipos.

Así es como empezarían las aventuras de Flash en el espacio. Sin embargo, no fue un buen comienzo. Poco a poco, notó como iba perdiendo el control sobre el simbionte, que se volvía cada vez más violento e irracional. Separado de sus compañeros tras la crisis con los skrulls, decidió seguir por su cuenta para averiguar lo que estaba sucediendo. No consiguió mantenerse aparte, puesto que por accidente se cruzó con Gamora y el simbionte tomó el control y la atacó. Junto al resto de Guardianes lograron reducirlo y llevarlo a la nave, pero allí el simbionte se separó de Flash y se fue apoderando de otros miembros de la tripulación, hasta que consiguió dejar a todos inconscientes y hacerse con el control de la nave.

Cuando despertaron, los Guardianes se encontraron en la órbita de un planeta alienígena, formado por simbiontes. Allí descubrieron que los simbiontes se trataban de una raza pacífica cuyo objetivo era fusionarse con otros seres para crear una orden de guerreros nobles que mantuvieran la paz en el Cosmos. El problema que tenían es que, si no se producía una fusión perfecta entre el anfitrión y el simbionte, éste se podía ver corrompido por los instintos del anfitrión, resultando en monstruos como Matanza, Toxina y otros. Flash era el candidato ideal para la fusión, pero el simbionte estaba corrompido por portadores anteriores, así que en el planeta purgaron dicha corrupción antes de que volviera a fusionarse con Flash y se convirtieran en un nuevo Agente del Cosmos.

A partir de entonces, tanto junto a los Guardianes como por su cuenta, Flash se dedicó a impartir justicia y ayudar a los que lo necesitaban, lo que le ganó una buena cantidad de amigos, como el robot suicida llamado 803, la reina del planeta Wugin, Iqa y otros agentes del cosmos, pero también lo llevó a enfrentarse a un cacique pirata espacial llamado Mercurio. Éste consiguió arrebatar el simbionte, lo que le devolvió sus tendencias violentas, pero cuando Flash acudió de nuevo al planeta a sanarlo descubrieron que esto había sido posible por la parte del simbionte que había permanecido en la Tierra fusionada a Andi, que actuaba bajo el nombre de Manía.

De regreso a la Tierra junto a los Guardianes, tras la llamada de su antigua compañera, la Capitana Marvel, que les había pedido ayuda en la inminente segunda guerra civil superheroica, Flash regresó a Filadelfia para buscar a Andi y poder sanar por completo al simbionte. La marca infernal había hecho presa en ella y Flash necesitó la ayuda de Spiderman para poder reducirla. Después de esto, se despidió de sus amigos espaciales y permaneció en la Tierra junto a Andi para cumplir la promesa que le había hecho tiempo antes y ayudarla a eliminar la marca infernal.

Lamentablemente las cosas darían un giro terrible para Flash. Mientras ayudaba a Manía, fue asaltado por agentes del FBI armados con tecnología anti-simbionte, que provocaron que se separase de él y huyera. Vagando en busca de un anfitrión, el simbionte acabó fusionado con el criminal Lee Price y finalmente de vuelta al que había sido tanto tiempo su anfitrión, Eddie Brock. Mientras tanto, Flash no había cesado en su búsqueda del simbionte y lo acabó rastreando hasta la torre Alchemax, donde Eddie estaba acudiendo para que le ayudaran con la fusión. Con sus dos principales anfitriones presentes y la llegada de Spiderman, la situación se salió de control y Flash acabó rociado de un suero experimental que transformó las trazas de simbionte presentes en él en lo opuesto al original y con poderes similares, pero anatema para el simbionte original, quedó convertido en el Agente anti-Veneno. Su toque era letal para el simbionte y nunca podrían volver a fusionarse.

Con esta nueva identidad tuvo que ayudar a Spiderman, la Gata Negra y Eddie, que definitivamente se había fusionado con el simbionte para convertirse de nuevo en Veneno, contra Lee Price, que había decidido recuperar el simbionte y se lo había robado a Andi, dando lugar al villano conocido como Maniaco. Esta batalla sirvió para que Flash y Eddie se convirtieran en amigos y le diera sus bendiciones para continuar ejerciendo como Veneno. Poco después volverían a reunirse para atajar la invasión de las ponzoñas, unos alienígenas parasitarios que devoraban y asimilaban simbiontes.

Seguirían más aventuras de Flash como Agente anti-Veneno, hasta que Norman Osborn, el Duende Verde, se fusionó con otro simbionte, el asesino Matanza, dando lugar al Duende Rojo. Con toda la inteligencia de Norman, los poderes de Matanza y la locura combinada de ambos, el Duende Rojo sembró el caos entre todos los conocidos de Peter y Flash. Gracias al suero experimental de Norman, las debilidades habituales de fuego y sonido de los simbiontes no le afectaban y sólo los poderes de Anti-Veneno podían hacer mella en él. Sin embargo, Flash tuvo que consumir casi todos su poder en curar a los aliados de Spiderman, que habían sido infectados por Norman con partículas de simbionte. Con apenas restos de su poder y desoyendo la petición de Peter, Flash empleó todo en poder curarle, dado que previamente Norman había dado una paliza y le había roto un brazo. En venganza por esto, antes de que Spiderman pudiera evitarlo, Norman atacó a Flash y acabó con su vida.

Recibió un funeral con todos los honores y su legado permanecería para siempre como inspiración para Eddie y el simbionte.

Cómics recomendados

La etapa de Flash como Agente Veneno es relativamente corta y reciente, así que no tiene sentido utilizar las categorías habituales. La recomendación en ese sentido es bastante clara, los cuatro primeros tomos de la colección 100% Veneno, guionizada por Rick Remender y dibujada por diferentes artistas. Este es el núcleo central donde se desarrolla verdaderamente el personaje y en el que Remender hace un trabajo sorprendente, convirtiendo una idea que en principio no era nada llamativa en un personaje con bastante profundidad y una historia interesante y oscura.

Dado que os tengo que avisar que esos tomos se encuentran agotados en editorial (a pesar de ser de 2012 aproximadamente) y es necesario acudir al mercado de segunda mano, mucho más fácil de conseguir son los dos tomos que se centran en sus aventuras espaciales, 100% Marvel. Veneno: Caballero del Espacio, guionizados por Robbie Thompson. Si bien no están a la altura de la etapa de Remender, son una lectura entretenida y destaca especialmente el dibujo de Ariel Olivetti en el primero.

Hasta pronto agentes, espero que hayáis descubierto, como he hecho yo, que tras una idea que en principio no gustaba a nadie, el trabajo de un buen guionista puede resultar sorprendente.

Informe clasificado creado por Rafa Cerrato y maquetado por Freakmod.